La exposición de fotografía “Todas nuestras lágrimas” entrelaza las historias de las víctimas de las guerras en la región de los Balcanes Occidentales en la década de 1990. Consta de 34 fotografías originales, tomadas por cuatro fotógrafos en varios lugares de Kosovo, Macedonia del Norte y Serbia. Las fotografías presentan fotos familiares de personas desaparecidas, así como sitios donde ocurrieron atrocidades, fosas comunes y monumentos conmemorativos, enfocando claramente la tragedia de la guerra y sus devastadoras consecuencias en la vida de las víctimas.
La exposición tuvo su inauguración final en la galería del Palais de l'Europe del Consejo de Europa, en Estrasburgo, Francia, en junio de 2023. En 2022, viajó por la región, con inauguraciones en Belgrado, Serbia; Pristina, Kosovo; y Skopje, Macedonia.
La exhibición fue parte de “Fortalecer las voces inclusivas de las víctimas, transformar las narrativas”, un proyecto de tres años financiado por la Unión Europea (UE) que reunió a organizaciones de la sociedad civil y grupos de víctimas en Kosovo, Macedonia del Norte y Serbia, junto con las organizaciones internacionales ICTJ y PAX para desarrollar iniciativas significativas de consolidación de la paz y reconciliación dirigidas por las víctimas en la región. Como parte del proyecto de la UE, las organizaciones también desarrollaron un conjunto de principios de justicia transicional compartidos, centrados en las víctimas y específicos del contexto, los cuales pueden ser usados por grupos de víctimas en los Balcanes Occidentales para guiar su trabajo a nivel nacional y regional.

A lo largo de la década de 1990, cuando Yugoslavia se dividió, sus territorios se convirtieron en brutales campos de batalla y en escenarios de los más graves conflictos y abusos en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Los abusos incluyeron ataques generalizados contra civiles, desapariciones forzadas, desplazamiento de población, violaciones sistemáticas y el uso de campos de concentración. Entre 1991 y 2000, más de 140.000 personas fueron asesinadas y casi cuatro millones más fueron desplazadas. El problema de las personas desaparecidas sigue acechando a la región: en el momento en que terminaron las hostilidades, se estimaba que había unas 35.000 personas desaparecidas, y muchas familias siguen esperando respuestas sobre la suerte corrida por sus seres queridos.
“All Our Tears” se enfoca en las experiencias de las familias de los desaparecidos y fallecidos, así como de los desplazados internos en la región, y busca movilizar un apoyo público más amplio en su búsqueda de la verdad y la justicia. “Este proyecto regional ejemplifica una notable colaboración entre diversos grupos, trascendiendo fronteras y fomentando la unidad en la búsqueda de la verdad, la justicia y la sanación de las familias afectadas por las guerras en la ex-Yugoslavia”, explicó Teodora Zahirović, gerente de relaciones públicas de Civic Initiatives, una organización de la sociedad civil serbia que participó en el proyecto y ayudó a organizar la exposición.
Para obtener más información sobre “Todas nuestras lágrimas”, incluidos los pies de foto detallados, consulte el catálogo de la exposición .